He regresado a escuchar The Future Sound Of London, después de un par de años, en los que prácticamente los tenía olvidados. No es que conozca toda su obra, pero definitivamente es un dúo británico, que con su integración electrónica, han logrado despertar lugares internos demasiado relevantes para mí.
De hecho, no me considero gran conocedor de proyectos electrónicos puros, pues generalmente me resultan aburridos y repetitivos; pero al escuchar una propuesta de sonidos tan vastos, que incluso llegan a captar ideas fílmicas, quedé automáticamente enganchado a este particular álbum, del que hoy quiero comentarles- ISDN.
Estoy seguro de que era una tarde lluviosa de un jueves, en la que se me ocurrió subir al último piso de mi edificio, a buscar a un muy querido amigo quien hoy vive en España.
Con él siempre compartí gustos musicales, de lecturas, cine, y hasta esotéricos, ya que pasamos muchos momentos discutiendo el tema OVNI, el atrapamiento de almas, y la existencia de dimensiones convergentes.
Ya podrán comenzar a imaginar lo profundo que llegábamos aquellas tardes al sur de la ciudad de México; dos jóvenes, que si bien, su servidor contaba con 22 años, mientras mi interlocutor habrá tenido no más de 26, puedo afirmarles, que lo formulado en aquellos años, aún sigue teniendo enorme incidencia en mi vida actual.
Esa tarde tuvo el singular distintivo, de que mi cuate Juan C., decidió poner música especial para dirigir nuestra conversación con una intención claramente misteriosa.
Me dijo que había conseguido un disco de "The Future Sound Of London", que no podía dejar de escuchar, y que debía poner peculiar atención mientras platicábamos. La tarde fluyó, y lo que más recuerdo de ella, fue que nuestros temas se fusionaron con el disco que hoy quiero compartirles.
ISDN es un álbum que hoy en día sigo utilizando para analizar temas metafísicos, o de poco conocimiento general, pues sus elementos sonoros, rebasan lo que estúpidamente escuchamos en las bandas o proyectos "mainstream", haciendo que aquel que se comprometa a escucharlo, brindando toda su atención, pueda sumergirse en un viaje interno, que si bien puede ser increíblemente disfrutable, también estará cargado de angustiosa extrañeza.
Esa tarde, o más bien noche, regresé a mi casa con este disco en mi poder, pues Juan C. insistió en que tenía que darle varias pasadas más, para lograr sacar el mayor jugo del mismo.
Hoy, puedo afirmar con toda certeza, que cada que re escucho el ISDN, llego a diferentes conclusiones sobre lo que acabo de experimentar auditivamente.
¿Qué más puedo decirles?... Es un disco que acompaña la lluvia, perfecto para la soledad, con sentidos diversos dentro de la obscuridad, que incita a prender velas mientras destapas un scotch-black del señor Walker.
¿Te gusta el ocultismo? ¿Disfrutas las pláticas dirigidas a cavernas existenciales? ¿Has tenido experiencias bizarras, que son difíciles de compartir?
Te invito a que con un BUEN SONIDO, le des Play al siguiente álbum, y comiences a disfrutar lo que quizás en años te habías perdido; aquello que te puede llevar a diferentes existencias, y encuentros con quienes no se muestran más allá de los terrenos oníricos.
¡¡Y claro!! No olvides después regresar, y compartirnos lo que te pasó.........
Entradas
0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar en este blog